River ya había anotado el quinto tanto contra Lanús y Luis Zubeldía decidió cuidar a su promisoria figura. El partido estaba sellado, no tenía la necesidad de exponer al joven Pedro De La Vega en un trámite ya irreversible. Cuando el reloj estaba cerca de marcar la media hora del complemento, decidió quitarlo del terreno.
La joven figura de 17 años le dejó su puesto a Jorge Pereyra Díaz. Hasta ahí, todo normal… Sin embargo, cuando el rubio llegó al banco de suplentes sorprendió a todos: se puso las manos en la cara, levantó su remera y rompió en llanto durante varios segundos mientras sus compañeros trataban de consolarlo.
De La Vega sumó su tercer partido como profesional tras tener su estreno ante Racing y luego enfrentar a Newell’s.
Finalmente, Lanús perdió 5-1 contra River en uno de los dos partidos que inauguró la séptima fecha de la Superliga y mira de cerca la zona del descenso. Actualmente, suma cinco derrotas en fila.
