En un contexto de creciente preocupación por la seguridad vial, el senador bonaerense de Hechos, Marcelo “Chuby” Leguizamón, presentó en las últimas horas un proyecto de ley para que se implementen controles obligatorios de alcoholemia y sustancias psicoactivas en los choferes de larga distancia que operan en la provincia de Buenos Aires. El objetivo de esta iniciativa es garantizar la seguridad de los pasajeros y prevenir accidentes en un servicio que transporta a miles de personas a diario.
La propuesta surge a raíz de numerosos incidentes registrados en los últimos meses, como el caso ocurrido el 25 de noviembre, cuando un chofer que transportaba a un grupo de chicos en un viaje de egresados dio positivo en un control de drogas. En este caso, el conductor, que llevaba a los jóvenes desde Exaltación de la Cruz hacia Cariló, se negó a realizarse el narcotest solicitado por los padres, pero luego de ser sometido al control, dio positivo para consumo de cocaína y marihuana, lo que derivó en su detención.
Otro hecho reciente que evidenció la necesidad de estos controles fue el ocurrido en Mar del Plata, donde un conductor de larga distancia fue desafectado por la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) luego de dar positivo en un test de sustancias en un control realizado en el peaje de Dock Sud. El chofer, que había consumido marihuana, iba a estar al frente de un servicio que debía trasladar a 63 pasajeros.
El proyecto de Leguizamón busca establecer la obligatoriedad de los controles de alcoholemia y detección de sustancias psicoactivas para todas las empresas, permisionarias o concesionarias que presten servicios de transporte automotor de pasajeros con jurisdicción en la provincia de Buenos Aires. Estos controles deberán realizarse antes de cada viaje, así como de manera sorpresiva y aleatoria durante la jornada de conducción.
“Establecer la obligatoriedad de los controles no debe interpretarse como una medida punitiva, sino como una acción de salud pública y prevención activa, que busca blindar la seguridad vial asegurando que el conductor esté en condiciones óptimas para desempeñar su tarea”, sostuvo el senador. En línea con la política de Estado de la provincia de Buenos Aires, que promueve la Tolerancia Cero de alcohol al volante, el proyecto tiene como objetivo reforzar esta norma en el sector del transporte de pasajeros, exigiendo a las empresas una responsabilidad directa y fiscalizable antes de cada servicio.
La iniciativa también contempla que las empresas de transporte deberán apartar inmediatamente a los conductores que arrojen resultados positivos y llevar un Registro de Control Preventivo de Conductores, el cual permitirá auditar y transparentar el cumplimiento de la norma.
De ser aprobado, el proyecto podría significar un avance importante en la protección de los pasajeros y en la prevención de accidentes en el transporte de larga distancia en la provincia de Buenos Aires.




