Una familia neuquina y el vehículo que conducían cayeron de modo sorprendente desde el ala superior del aeropuerto de Bariloche al vacío producto, se especula, de una mala maniobra o de un problema con la caja automática de cambios.
Este sábado alrededor de las 17 una abuela, su esposo y sus nietos de 15 y 18 años estaba saliendo con normalidad del estacionamiento del aeropuerto cordillerano en el área de Partidas en su Mitsubishi. Este sector se encuentra en el segundo piso del edificio. De manera repentina, cuentan testigos, el vehículo aceleró con fuerza y siguió de largo, superando un muro de cemento de baja altura, hasta quedar depositado en la parte baja, dado vuelta, justo donde se realizan los Arribos.
Solo un milagro impidió que nadie más saliera herido como producto del tremendo impacto. Miles de pasajeros, entre turistas y vecinos, circulan cada día de a pie y en auto por la zona.
La mujer, que se llevó la peor parte, fue llevada de urgencia al hospital Regional de la ciudad. Según se informó en la institución, su estado es grave producto de un severo traumatismo craneal y se encuentra en coma. Los demás familiares recibieron contusiones de menor importancia.
La imagen del vehículo es impactante. Durante varias horas permaneció dado vuelta tal como quedó luego del choque contra el suelo, en un espacio ubicado a centímetros apenas de las puertas automáticas que atraviesan apurados los pasajeros de forma cotidiana.
La parte trasera del auto quedó contra una de las murallas del edificio, mientras que la delantera ocupó parte de la vereda. Sus puertas quedaron abiertas, el techo totalmente aplastado y algunos de los objetos personales resultaron esparcidos debido a la intensidad del golpe.
Fuente: Clarín