L-Gante, el popular referente de la llamada cumbia 420, cerró su show masivo y gratuito en predio de Tecnópolis, con lágrimas en los ojos y emocionado por la devolución del público, y se despidió con un mensaje para los jóvenes acerca de la educación.
«Me hicieron llorar. Espero que lo hayan pasado completamente de diez y que lo hayan disfrutado. Antes que nada agradezco a cada uno de ustedes por el aguante y a los que no les gusta lo mío pero tuvieron el valor de traer a los pibitos para disfrutar», señaló desde el escenario luego de dos horas de repertorio.
Con su novia Tamara y su hija Jamaica acompañándolo sobre el escenario, el artista señaló que su llegada a Tecnópolis surgió a partir de un primer acercamiento con la cartera de Cultura, declaró: «Vine a averiguar para terminar la escuela y terminé haciendo una joda. Para después poder estudiar una carrera y seguir para adelante«.
«Hay que darle para adelante. Yo cumplí mi sueño, pero cuánto más me queda por delante, cuántas cosas más por saber, aprender y ser. Así que bien ahí, siempre para adelante», señaló.
Minutos previos a su show, el artista se sacó fotos con sus fanáticos y compartió un agradable momento con ellos. Según las fotos de Telám, el cantante tuvo un dulce momento con sus admiradores más pequeños, a quienes les regaló un abrazo.