Falta menos de un año y poco se sabe de cuándo se va a votar en la provincia y los municipios. Es que, semanas atrás la gobernadora María Eugenia Vidal le abrió la puerta a la posibilidad de despegar la elección por la gobernación bonaerense de las presidenciales. En el medio, Sergio Massa la habría pedido a cambio de votar el Presupuesto bonaerense para que también se desdoblen las de los municipios y así evitar que los jefes comunales que todavía le responden se vayan con Cristina Fernández de Kirchner.
Es un juego de ajedrez en el que ni siquiera se conocen las medidas del tablero. Ya que no sería lo mismo una elección tradicional, donde se mete en el mismo sobre la boleta de los candidatos a Presidente, Gobernador e Intendente, que si se eligen en días separados.
¿A quién beneficia el desdoblamiento? Quizás no sea una respuesta tan fácil de responder.
Lo que sí es seguro es que para el líder del Frente Renovador sería más negocio que los comicios municipales se despeguen del resto. El problema de Massa es que los intendentes que todavía le responden, en un esquema tradicional de elección irían con Cristina para beneficiarse del efecto arrastre de Cristina. La ex Presidenta polariza cualquier presentación y, si bien perdió por unos puntitos con Cambiemos en 2017, posee un voto cautivo que no ostenta ningún otro candidato. A ello hay que sumarle que la crisis económica que produjo el gobierno nacional, todavía le aporta más potencial.
En ese escenario, una elección municipal desdoblada podría licuar el efecto ‘Cristina’ y ayudar al tigrense a convencer a los jefes comunales a que en lugar de bandearse con la grieta, transiten la cada vez más angosta y poceada avenida del medio.
Dicen los que conocen la arena electoral que en el cuarto oscuro la ‘boleta se agarra por arriba por la situación económica y por abajo por la calidad de la gestión local, se mira lo nacional antes que lo local‘ . Si se hacen los comicios de la gobernación separados de la elección presidencial, Vidal podría evitar el rechazo de quienes la pasaron muy mal económicamente hablando, pero que todavía le creen al ‘hada buena’ de la Provincia.
La jugada de todos modos depende de la aceptación de Caso Rosada. Una razón por la que podrían dar el visto bueno desde Balcarce 50 es porque una victoria adelantada en Buenos Aires tendría un efecto arrastre para las presidenciales. Si se suma el previsible triunfo de Larreta en la Ciudad, Macri llegaría a octubre con dos victorias importantes bajo el brazo.
En cualquier caso la confirmación de que se van a desdoblar las elecciones todavía está muy lejos. Lo que hará por estos días la Provincia es solamente dar el marco legal para que, eventualmente si las encuestas muestran que conviene, avanzar en esa dirección.
Por último, alguien evaluó los gastos de más que implicaría hacer varias elecciones en la provincia más poblada del país. No sólo para el Estado, sino también para la política. Y esto será justo el año en que los aportes de campaña estarán bajo la lupa.
La incertidumbre de cómo serán las elecciones debilita la democracia, ya que estas dudas sobre cómo serán los comicios no le permite a la oposición armar el complicado rompecabezas de candidatos para la unidad.
Fuente: M1
