El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) informó este miércoles que la inflación de abril fue del 2,8%, consolidando así una desaceleración respecto al 3,7% registrado en marzo. Con este dato, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumula un 11,6% en lo que va de 2025 y un 47,3% en los últimos doce meses, entre mayo de 2024 y abril de 2025.
El informe oficial destacó que la división Alimentos y bebidas no alcohólicas —la de mayor impacto en todas las regiones del país— subió un 2,9%, impulsada principalmente por aumentos en carnes y derivados, productos lácteos, huevos, pan y cereales.
Las mayores subas mensuales se registraron en Restaurantes y hoteles (4,1%), debido al incremento en alimentos y bebidas consumidos fuera del hogar; Recreación y cultura (4%), por subas en servicios recreativos y culturales; y Prendas de vestir y calzado (3,8%).
En cuanto a las categorías analizadas, la inflación núcleo —que excluye precios estacionales y regulados— se ubicó en el 3,2%, por encima del IPC general, lo que refleja una presión persistente en los precios básicos de la economía. En tanto, los precios estacionales subieron 1,9% y los regulados, 1,8%.
Desde enero, la inflación núcleo creció 12,2%, superando al índice general (11,6%), así como también a los productos estacionales (10%) y regulados (10,3%). En la comparación interanual, los precios regulados lideran las subas con un 57,4%, seguidos por el IPC general (47,3%), la inflación núcleo (46,9%) y los estacionales (33,5%).
El dato de abril es el primero tras la salida del cepo cambiario y la implementación del esquema de bandas para el dólar, y será clave para evaluar la efectividad de las medidas oficiales destinadas a contener la inflación sin frenar la recuperación económica.